La Bolsa española presenta una alta rentabilidad por dividendo si la comparamos con la media europea. La media de retribución al accionista en el Ibex 35 está por encima el 5%, por lo que es muy interesante para inversiones que quieren diversificar su cartera pensando en el largo plazo.
El consenso de Bloomberg para 2016 ha estimado la política de dividendos de cada compañía y nos ha presentado su rentabilidad prevista. Las vacas lecheras del Ibex 35 con una media superior al de sus respectivos sectores son…
- Telefónica (8,69%)
- Endesa (6,35%)
- Repsol (6,21%)
- BBVA (6,17%)
- Abertis (5,23%)
Unas cuantas cosas debemos considerar si queremos invertir en dividendos y no queremos que nuestra estrategia se convierta en fracaso. Aunque puede ser un factor decisivo para decidirnos por un valor en concreto no estaría mar recordar…
- No es recomendable construir nuestra cartera de valores únicamente considerando la rentabilidad de los dividendos.
- Y esto es debido a que los directivos de la compañía continuamente están planteándose si deben bajar o mantener su política de retribución al accionista. Resumen: si buscas estabilidad a largo plazo no inviertas en algo que puede ser inestable.
- Si quieres perder menos y ganar más diversifica tu cartera. Normalmente las compañías que pagan dividendos lo hacen porque tienen una generación de flujos estable, operan en su sector muy maduro y no esperan grandes sobresaltos en el horizonte temporal. Por eso pueden compartir un trozo de pastel con el inversor. Suelen ser empresas de sectores como la energía, las telecomunicaciones o la banca. Invertir a la par en una compañía de tecnología sería un buen ejemplo de diversificación. Ambas se complementan y no mantienen una correlación muy alta.
- Si una empresa que retribuye con scrips dividends a sus accionistas consíderalo peligroso. Esto es que en vez de darte dinero te pagan mediante acciones. Acciones que salen mediante una ampliación de capital previa al reparto de dividendos. Si te pagan con acciones que no paran de bajar día a día quizás te interese invertir por una compañía que no reparta dividendos. Mejor un trozo de pastel bien protegido, que dos trozos de pastel donde los ratones ya empiezan a repartirse su botín. A todo esto, los scrip dividends también tienen beneficios fiscales que pueden hacerlos interesantes para muchos.
Fuente: Expansión