Tras el fallecimiento de Jack Bogle, mi curiosidad por seguir aprendiendo sobre inversión indexada está en máximos históricos. Para mí es la única forma de inversión viable que existe, junto con el value investing. Todo lo demás es humo.
Me topo por casualidad con este fantástico post de Joan Tubau explicando cómo ahorrar con fondos indexados. Una verdadera joya bursátil que ha hecho lo imposible: convertir la inversión pasiva en pura diversión y en frenesí literario. Porque no nos engañemos, si algo le falta al inversor pasivo es la adrenalina de los mercados. Y cuanto se agradece esto en el día a día…
Más aburrimiento, más rentabilidad en el largo plazo. Opuestamente, más diversión, más probabilidades de perderlo todo. Esto se puede aplicar a cualquier cosa que lleve asociada dinero. Si quieres emociones fuertes ve al casino, si quieres amasar un patrimonio invierte mediante la inversión pasiva.
Aquí van los 4 pasos para convertirte en un inversor pasivo.
Define tu asset allocation
Decidir dónde quieres invertir sea quizás el paso más importante y determinante.
Una composición inteligente debería diversificar entre renta variable (acciones) y renta fija (bonos). Aunque también son recomendables activos refugio como el oro y los bienes raíces en pequeñas cantidades para paliar el riesgo aún más.
Además, es interesante dejar un pequeño e infinitesimal porcentaje para especular (Bitcoins, pequeñas empresas con un gran potencial o a lo que alcance tu creatividad)
Jack Bogle recomienda utilizar la fórmula: (100 – Tu Edad)% para invertir en acciones. Más volátiles, pero mucho más rentables en el largo plazo.
Compra fondos indexados
Una vez que tienes claro lo que quieres sólo falta comprarlo.
Algunos de los mayores fondos indexados del mundo incluyen Vanguard, iShares (de BlackRock) y Lyxor (controlada por Société Générale). Quédate con los nombres.
Puedes contratarlos directamente a través de Renta 4, BNP Paribas o SelfBank. Estos brokers te permiten acceder a un amplio abanico de fondos indexados y ETFs y saciarán todo tu apetito pasivo. Presta especial atención a las comisiones. Deben ser bajas. Fija la cifra del 0,40% para pivotar. No te alejes.
Rebalaceamiento
La inversión pasiva suele estar completamente automatizada. Pero como un coche autopilotado de Google, es importante decirle dónde queremos ir. De lo contrario, estamos jodidos.
Nuestra ponderación de activos fijada en el primer paso variará cuando el precio de los activos fluctúe. Unos activos subirán más que otros. Para mantener los porcentajes fijos del asset allocation escogido deberemos comprar o vender para ajustarlos.
Firma el documento de Jason Zweig
Un inversor pasivo es más que un mero inversor común. Es una persona que firma un propósito de vida. Un pacto religioso de ahorro e inversión. De comprar libertad financiera, tiempo y tranquilidad invirtiendo en Bolsa.
Los factores psicológicos y personales siempre estarán ahí latentes para jodernos nuestra inversión y tirar a la basura nuestros progresos.
Es importante comprometerse con uno mismo a seguir el plan estipulado. Porque habrá momentos en que veas evaporarse la mayor parte de tu dinero. Y querrás vender. Y será ahí, cuando debes mantenerte firme.
La alternativa de los robo advisors
A veces simplemente no queremos complicarnos la vida. Y queremos dejar que un experto lo haga por nosotros mismos. El algoritmo informático de un robo advisor puede ayudarnos a seleccionar nuestra asset allocation según nuetro perfil de riesgo en menos de 5 minutos.
En España tenemos varios de muy buena calidad, aunque personalmente me quedo con Finizens por su sencillez y resultados. Aquí te cuento con más detalle mi forma de invertir.